¿La Tecnología nos está vigilando?

¿Sientes que la web y tus dispositivos intuyen lo que piensas o lo que deseas?

¿Recuerdan a Skynet? La Inteligencia Artificial que tomó autonomía sobre los humanos y luego decidió exterminarlos en la franquicia Terminator, Skynet [VIDEO] se desarrolló de un procesador de red neuronal que funciona en red, libre de hardware, por lo que no tiene un núcleo de funcionamiento fijo y no puede ser desactivada o destruida lo que le supone una gran ventaja en caso de dominación mundial. ¿Te suena familiar? Fuera de la ficción Google es un Skynet en desarrollo no tan alejado de la realidad futura con su constante desarrollo de aplicaciones interconectadas y de retroalimentación en la nube.

¿No te han pasado que mientras navegas por la web sientes que de alguna manera la plataforma intuyera tus gustos? Aprendiera de ti o te sugiriera ciertas cosas acorde a tu personalidad, como si de alguna manera supiera lo que piensas, deseas o te invitara a desear algo a través de la publicidad, blogs, sugerencias, etc.

No son cosas tuyas y no estás loco, si sucede y todo se lo debemos al BIG DATA que sería una forma creppy en como Skynet aprende de nosotros o en este caso Google u otros desarrolladores, el Big Data [VIDEO] no hace otra cosa que recopilar datos e información y luego usarlo en nosotros mismos, casi que manipulándonos subliminalmente, y gran parte de la población lo pasa desapercibido…

Ya no existe la privacidad

La privacidad solo existe en nuestros pensamientos (por ahora), mientras uses cualquier dispositivo inteligente no estás a salvo de ser monitoreado. Si nos ponemos a analizar la situación con detenimiento vivimos conectados a dispositivos inteligentes que además se interrelacionan entre ellos (celulares, Tablets, Smart TV, Smartwacth, Laptops, Consolas de video juegos, etc.) recibimos información a través de estos y nosotros enviamos, compartimos y comunicamos datos e información constantemente con otras personas, aplicaciones, redes sociales [VIDEO], entre otros… y todo lo que sube a la web jamás se destruye, así que si crees que borrando tus chats desaparecerán tus Nudes ¡pues no! ahora pertenecen a la empresa desarrolladora del medio que usaste para enviársela a alguien más, ¿tétrico no?

Pues la verdad esto no es nada nuevo, técnicamente y conceptualmente hablando lo nuevo es como las corporaciones, agencias y desarrolladores de inteligencia hacen uso de dicha información, y quizás te preguntas ¿Pero cómo la obtienen? Si crees que en el Internet todo es gratis, pues bienvenido a la realidad, tú mismo autorizas esta intervención y monitoreo constante en tu vida, digamos que firmamos un contrato con el Diablo sin leer las letras pequeñas, esto pasa siempre que navegamos en algún sitio web y aceptamos las cookies o descargamos alguna aplicación y nos piden permisos de administrador y sin pensar le damos aceptar a todo y suceden casos muy irregulares como por ejemplo que nuestra linterna del mobile pida acceso a nuestro registro de llamadas o al micrófono del teléfono ¡Qué Diablos! si la linterna es para iluminar no para llamar a nadie o ¿acaso nos estarán escuchando?

Básicamente al autorizar damos permiso para que obtenga información sobre nosotros, información que a veces llenamos en nuestras redes sociales, aplicaciones o que están almacenadas en nuestro teléfono y además hacen seguimiento a nuestro comportamiento en la web, que sitios visitamos, con que interactuamos o que vemos, si, incluyendo el porno… Esto lo hacen con todos los usuarios básicamente somos la población de un gran experimento social y tecnológico, nuestros datos son analizados e interpretados y estos los usan para mejorar el marketing digital entre otras cosas quizás más oscuras, ¿Quiénes están detrás? Gobiernos, corporaciones, Iluminatis (para darle un toque de paranoia) la verdad es difícil saberlo.

Aunque algunos pocos conocedores de programación pueden poner límites a su privacidad y navegar por la red sin dejar rastros, el resto de la población simplemente es monitoreado y analizado, así que no te extrañes si en una conversación en Instagram detallaste tu deseo de un artículo y luego más tarde en Facebook se te presente publicidad sobre este de la nada.